Los motores del crecimiento en América Latina – PAGINA SIETE – 18.7.2011

El ingreso masivo de ahorro externo a través de la inversión extranjera directa (IED). En el 2010, entraron a la región 110 mil millones de dólares, en especial a Brasil y Chile. Buena parte de estos recursos se dirigió al sector servicios. En el pasado la IED se concentraba en los recursos naturales.

La nave económica boliviana no vuela con este motor, más bien se sustenta en las exportaciones y el gasto público. En Bolivia, la inversión externa, en 2010, apenas sobre pasó los 500 millones de dólares y sigue concentrada en minerales y gas natural.

Gonzalo Chávez A – La Comisión Económica para América Latina (CEPAL) ha publicado su tradicional estudio económico para la región. Las noticias siguen siendo muy alentadoras para la mayoría de los países del continente.

Para 2011 se proyecta un crecimiento promedio de 4,7%. Los países con mayor dinamismo serán Panamá, Argentina y Perú. Para la economía boliviana se vaticina un crecimiento de 5,3%, cifra que nos coloca levemente por encima del promedio y nos coloca en el medio de la tabla de posiciones regional.

Éste es un resultado aceptable y muestra que desde el punto de vista del crecimiento económico nos va mejor que en el fútbol, pero aún estamos lejos de los punteros. El buen desempeño regional se explica por el funcionamiento de tres motores, a saber:

a) El fabuloso contexto internacional. Los precios de las materias primas continúan por los cielos. Ni en los mejores sueños se pensó el gas natural a diez dólares o el estaño por encima de 14 verdes la libra fina.

Según la CEPAL, la mayor parte del aumento de las exportaciones de América del Sur se explica por el efecto precio, que para el año 2011 sería de 23,7%, en cuanto el efecto volumen tan sólo alcanzaría el 10%. En el caso boliviano, el efecto precio sobre nuestras exportaciones sería similar al de la región en cuanto el efecto cantidad alcanzaría tan sólo el 7%.

b) El aumento del gasto y la inversión pública. Después de la crisis de 2008, todos los países de la región se volvieron keynesianos. El gasto primario está en torno del 7% del PIB.

c) El ingreso masivo de ahorro externo a través de la inversión extranjera directa (IED). En el 2010, entraron a la región 110 mil millones de dólares, en especial a Brasil y Chile. Buena parte de estos recursos se dirigió al sector servicios. En el pasado la IED se concentraba en los recursos naturales.

La nave económica boliviana no vuela con este motor, más bien se sustenta en las exportaciones y el gasto público. En Bolivia, la inversión externa, en 2010, apenas sobre pasó los 500 millones de dólares y sigue concentrada en minerales y gas natural.

El buen momento de la economía latinoamericana contrasta con los serios problemas económicos y financieros de Europa y Estados Unidos, de hecho este país corre el riesgo que le bajen su calificación crediticia.

La economía internacional registra resultados positivos gracias a la pujanza de las economías emergentes como Brasil y Chile en América Latina y China e India en otros continentes. En efecto, en 2011, los países desarrollados crecerán al 2%, en cuanto los países en desarrollo registrarán un crecimiento del producto de 6,2%.

El referido informe también señala que existen luces rojas que opacan, parcialmente, el éxito regional. Éste sería el caso del aumento de la tasa de inflación, especialmente de alimentos, que seguiría mermando el salario de los latinoamericanos. En Bolivia, el aumento de precios también nos quita el sueño.

Otra preocupación es la fuerte apreciación del tipo de cambio real. En varios países de América Latina, entre los que se destacan Venezuela Brasil y Colombia, registran apreciaciones de sus monedas que varían entre el 20 y 30%. Esta situación encarece el país y resta competitividad a las exportaciones no tradicionales.

El boliviano también está apreciado aunque en menor escala. Finalmente, a la CEPAL le preocupa el deterioro del saldo en cuenta corriente (que se define como la diferencia las exportaciones y compras de afuera de bienes y servicios), debido al incremento significativo de las importaciones que se explica por el crecimiento del Producto Interno Bruto en la región. Es así que en el Cono Sur en 2011, del comprado en el exterior, 21,6% representaría efecto volumen y 12,9% sería el impacto del precio.

El caso boliviano es similar a Colombia, Ecuador y Venezuela, donde el efecto volumen sobre lo importado alcanzaría al 18,4%, en cuanto el efecto precio sería tan sólo del 11,5%. De una manera más sencilla, antes importábamos máximo unos 2.000 millones de dólares, ahora sobre pasamos los 5.000 millones de verdes.

Las proyecciones de la CEPAL para 2012 son más modestas. América del Sur crecería tan sólo 4,2%, Bolivia estaría muy próxima de este promedio. La desaceleración de la economía regional se debería a los problemas de recuperación de la economía estadounidense, la compleja crisis europea y una pequeña reducción del crecimiento de países como China e India.

El informe económico también presenta otros riesgos y desafíos. Mencionemos solamente los más importantes por cuestión de espacio. Latinoamérica se ha convertido en una región más vulnerable a los movimientos de capitales especulativos especialmente en países grandes como Brasil, Argentina y Chile y a los choques externos vía reducción abrupta de precios de las materias primas.

Ésta es una debilidad de la economía boliviana. Así mismo preocupa que estén surgiendo burbujas especulativas en los mercados inmobiliarios y financieros. En toda la región el metro cuadrado de la vivienda se ha multiplicado por dos o por tres. En Bolivia se registra una fiebre de construcción. También preocupa que la bonanza de los precios internacionales haya llevado a la reprimarización de la economía latinoamericana.

La región nuevamente es un masivo exportador de recursos naturales, lo que se ha cambiado es su destino, antes Estados Unidos y Europa, ahora China y otros países en vías de desarrollo. Bolivia es cada vez más dependiente de Brasil y Argentina en el tema energético.

En suma, se trata de un informe optimista sobre los próximos dos años en la economía latinoamericana, pero enfatiza que la región tiene dos velocidades, la de aquellos países que están creciendo y realizando transformaciones estructurales en dirección de una mayor industrialización y aquellos que sustentan su crecimiento tan sólo en una burbuja de consumo que se origina en mejores precios de las materias primas. Estos últimos deben vivir con el Jesús en la boca.

Gonzalo Chávez A. es economista.

http://www.hidrocarburosbolivia.com/panorama-mundial-mainmenu-109/analisis-y-opinion-mundo/44077-los-motores-del-crecimiento-en-america-latina.html

Sin Comentarios

Aún no hay comentarios.

Escribe tu comentario:

Editor: Willi Noack | Administración Técnica: Jose Carlos Choque Y. | Creatica Ltda.