Cuentas del déficit fiscal, “pozo sin fondo” – EL DIARIO Editorial – 2.6.2011

La economía nacional no puede depender de la ilusión de “reservas” ni de  acumulación de deudas para el Estado;…

El presupuesto general de la Nación tiene el objetivo de compatibilizar los egresos con los ingresos; es decir que en ningun caso se sobrepasen los montos para evitar déficits que, más a la corta que a la larga, son acumulativos y llenan la partida de la deuda interna del país.

Año tras año, las autoridades financieras han tratado de evitar los extremos; pero como las políticas partidistas – especialmente con gobiernos populistas o, peor, en regímenes dictatoriales – son las que buscan “satisfacer” a la población con anuncios rimbombantes, no vacilan en crear más gastos, sin importar que ello implicará mayores montos en el déficit.

Ahora, como en otras gestiones, los anuncios muestran la seguridad de que se presentará nuevamente el fenómeno con miras a cargarlo a la cuenta de la deuda interna. Las autoridades económicas, poco conscientes del daño que le hacen al país, contentan sus conciencias con el simple anuncio, cuando la realidad debería ser diferente porque lo ideal sería buscar una alternativa al déficit mediante el encuentro de posibilidades para que el país salga del estancamiento económico en que se encuentra.

Vivimos de fantasías y utopías debido a los altos precios del petróleo porque nuestras exportaciones de gas implican mayores ingresos en divisas aunque por una producción menor no sólo de gas sino de minerales y algunas otras materias primas; pero, ¿qué se está haciendo para reponer medidas que han sido canceladas hace muchos años y que impiden mayor producción y creación de empleo? ¿Para cuándo se guarda la aprobación de garantías para las inversiones nacionales y extranjeras? ¿Cuándo se repondrán las garantías para un trabajo armónico y sostenido de la actividad privada? ¿Qué pasos se dará para diversificar la economía? ¿Cuándo se entenderá que pese a “ilusiones socialistas y economía de Estado” seguimos en los campos del capitalismo? ¿Hasta cuándo se pregonará posiciones contrarias al neo-liberalismo cuando seguimos insertos en el mismo?

El “pozo sin fondo” del déficit fiscal, para contento de las autoridades, lamentablemente seguirá funcionando, especialmente si no hay posibilidad de cambios para entender la realidad nacional y evitar la consumación de más errores; esta es una realidad que, conforme pasa el tiempo, más daño causa al país y, además, contribuye a una mayor inflación que no tiene visos de parar.

La economía nacional no puede depender de la ilusión de “reservas” ni de acumulación de deudas para el Estado; es tiempo de actuar con base en realidades y poner en práctica soluciones que pueden disminuir la crisis y reavivar el trabajo y la producción, incrementar las exportaciones y dar lugar a que se cree empleo; de otro modo, el descenso a mayores niveles de pobreza irá acentuándose. Son verdades que las autoridades económicas deben entender y, además, olvidarse del apoyo a la dejadez y la desidia que implica el recurrir al déficit fiscal.

Mientras el Gobierno no reconozca que vive en pleno capitalismo y que es preciso tomar conciencia de la realidad que vive el país, los problemas se acentuarán y, consecuentemente, aumentará la inflación y los conflictos sociales adquirirán dimensiones no previstas. El Gobierno, consciente de su responsabilidad, no debe persistir en errores económicos que podrían implicar problemas de los cuales sea difícil salir.

http://www.eldiario.net/noticias/2011/2011_06/nt110602/0_01edt.php

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