“Yo rindo mi homenaje a mi patria, a la REPUBLICA DE BOLIVIA” – Julio Cesar Gil Quiroga – 11.8.2010
HOMENAJE A LA REPUBLICA DE BOLIVIA
Julio Cesar Gil Quiroga
En condiciones normales, me tocaría hacer una reseña histórica de las gestas mediante las cuales nuestro país alcanza su independencia, y por supuesto, también debería resaltar las condiciones personales de quienes hicieron posible esta epopeya.
Algunos meses atrás, el gobierno declara feriado nacional el día 22 de enero, fecha en que se aprueba en forma ilegitima e ilegal la actual Constitución Política que nos rige, cambiando la denominación de nuestro país de “Republica de Bolivia” a “Estado Plurinacional de Bolivia”, “aduciendo que la historia comienza en esta fecha”, en la que se da un supuesto fin, a 500 años de coloniaje; 300 por parte de España y 200 por parte de la Republica. Asimilando de esta manera a europeos y nacionales no originarios, como extranjeros colonizadores.
Hace apenas días atrás, el gobernador de Chuquisaca siguiendo el concepto antes descrito declara; “Para nosotros la historia comienza el 22 de Enero, por lo tanto no hay nada que celebrar el 6 de Agosto.”
Hace algunas horas atrás, se transmitía por Televisión como las llamadas Fuerzas Armadas, rendían su homenaje a la whipala y entonaban el lema de “Patria o Muerte, Venceremos” , en un acto de traición a sus juramentos y a nuestros muertos y héroes que lucharon en la guerrillas de Ñancahuazu, defendiendo su patria del invasor extranjero.
El llamamiento a una Asamblea constituyente, supone la conformación de un organismo que se encargara de establecer las normas de un nuevo contrato social que regirá entre los habitantes de un país y por supuesto estas deben ser aprobadas en razón a territorio y población, por todos, en forma unánime, ya que lo contrario supondría ya no un contrato, sino, una imposición, esto asumiendo el hecho que nuestro país está conformado por muchas etnias, lo que a su vez supone que las etnias mayoritarias impondrán su voluntad, ya que las decisiones se toman por mayoría de votos. Ósea, se inicia un proceso de colonización interna mediante la desculturización de las llamadas minorías.
Esta asamblea, plagada de vicios, ilegalidades y anormalidades se resiste a escuchar las voces del 70% del territorio nacional y del 40% de la población de Bolivia y en una forma atrabiliaria e inédita, aprueba en las instalaciones de un cuartel militar, sin la presencia de los asambleístas no afines al gobierno a los cuales se les negó el ingreso a dicho cuartel, sin discusión ni conocimiento del nuevo texto constitucional por parte de los asambleístas presentes, una nueva constitución de lo que ellos llaman un nuevo país, EL ESTADO PLURINACIONAL DE BOLIVIA, que nace bañado en sangre, la sangre de los HEROES DE SUCRE que entregan sus vidas en LA CALANCHA, resistiendo con las únicas armas que poseían, su moral, sus pechos y sus puños, el asalto militar y policial con el que el gobierno castiga a un pueblo digno y valiente.
Luego la nueva historia, esta nueva historia, es la de un país cuyo Tribunal Constitucional no funciona, donde tanto el Poder Judicial como el Legislativo, se subordinan al Poder Ejecutivo, la Contraloría deja de ser un organismo de fiscalización y las Fuerzas Armadas pasan a ser un organismo más de represión del poder político.
A los pueblos dignos y consecuentes, se los castiga, se los persigue, se los acusa de separatistas, de terroristas y se los somete a estados de pánico interno, se cercan ciudades con campesinos armados y dirigidos por militares, se mata gente y luego se apresa y acusa a quienes cometen el delito de intentar defenderse.
La libertad de conciencia, ahora es un delito; disentir es atentar en contra del régimen, está prohibido; la democracia ya dejo de ser demócrata; a quienes fueron elegidos por el voto popular y no responden a la línea del gobierno no se los respeta y se los está retirando de sus cargos con argucias ilegales, los perdedores en las urnas asumen los puestos que el pueblo les negó con sus votos.
Por eso es que hoy, no puedo, rendir un homenaje a este ESTADO LLAMADO PLURINACIONAL, a este estado que se conforma de ciudadanos de primera y segunda clase, que tienen leyes distintas para unos y para otros, que crea una justicia comunitaria que es la más elemental y primitiva de todas las forma de justicia, que fomenta el asesinato y el delito con la más absoluta impunidad, que crea estados dentro del estado, en los cuales se fomenta el cultivo de la coca y la fabricación de drogas, donde el Presidente de los sindicatos productores de coca y cocaína, a su vez Presidente de este Estado Plurinacional cualquier día de estos declarará públicamente : “Que el siente que con la hoja de coca se puede elaborar cocaína”, así como un día declaró; “Que el siente que existe narcotráfico en Bolivia.”
Yo no puedo rendir un homenaje a un estado que me considera un extranjero, todo por el simple delito de ser mestizo o blancoide o indígena no alineado, ni alienado; a un estado que no me protege y que anda buscando la forma de cómo deshacerse de mí por las malas o las peores, en resumen un estado que NO ME QUIERE.
Yo voy a rendir un homenaje al Cacique Indígena y al Capitán Hispano, a la hermosa andaluz y a la bella cuñatai que poblaron mis sueños de juventud y mis ansias de patria, todos ellos, sangre de mi sangre, historia de mis mayores, amalgama de la que nacieron mis hijos y espíritu de mis muertos, aquellos que lucharon por darnos un lugar digno bajo el sol, que lleva el nombre de nuestros héroes, de los Bolivares y los Sucres, de los Lanza y los Calatayud, de los Padilla y los Warnes, de lo katari y los Apaza, en fin de todos aquellos que hicieron posible que en esta tierra nazca el nuevo mundo, del cual nosotros somos esencia y somos alma.
Yo voy a rendir un homenaje a quien presté juramento de lealtad y fidelidad ante su bandera: Rojo, Amarillo y Verde, símbolo que representa a una sola nación, formada de muchas etnias que luchan por ocupar un lugar en el mundo y en la historia, por una nación por la que llore de dolor y de alegría por sus muchas derrotas y sus pocos triunfos y de la cual soy orgulloso.
Yo rindo mi homenaje a mi patria, a la REPUBLICA DE BOLIVIA.
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Sin categoría | Willi Noack 11 Agosto 2010
