Será casi imposible para la sociedad apolítica revertir la impresión de que la Justicia está sometida al Órgano Ejecutivo y al partido de Gobierno…

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ONU observa la Ley de Juicio de Responsabilidades 22/03/2010-16:12 | Videos Los representantes de la Organización de Naciones Unidas (ONU) denuncian que la justicia ordinaria está en crisis.

Mucho tiempo antes de que el presidente Evo Morales asumiera el poder, la credibilidad de la Justicia ya era puesta en duda.

Algunos gobiernos que se sucedieron desde la restauración de la democracia, en 1982, tuvieron a la Justicia inclinada a su lado. Es cierto que también hubo magistrados de alta credibilidad por su imparcialidad, conciencia de justicia y entereza moral que enaltecieron la actividad judicial del país.

La credibilidad de la Justicia, a pesar de esos altibajos, nunca antes fue tan duramente cuestionada como ahora debido al nada democrático acto presidencial de nombrar, uno a uno, a seis ministros de la Corte Suprema de Justicia, a los magistrados del Tribunal Constitucional y del Consejo de la Judicatura.

Ello generó un fundado sentimiento de mayor desconfianza en la imparcialidad de la Justicia, especialmente en juicios a opositores políticos. Son muy pocos los que creen que los supremos magistrados serán justos e imparciales y no se dejarán influenciar por el Órgano Ejecutivo que, con el presidente Evo Morales a la cabeza, además de haber concentrado todo el poder, es el principal acusador.

Si a esa desconfianza se suma el hecho de que las actitudes gubernamentales están dirigidas a acabar con la oposición política, persiguiendo y acusando de haber cometido delitos, con razón o sin ella, a cuanto dirigente opositor hay, se llega a la conclusión de la existencia de una estrategia destinada a allanar el camino para perennizarse en el poder y cumplir lo anunciado por el Presidente del Estado Plurinacional cuando dijo que había llegado al Palacio para quedarse por muchos años.

Será casi imposible para la oposición, la sociedad apolítica e incluso para algunos sectores oficialistas, revertir la impresión de que la Justicia está sometida al Órgano Ejecutivo y al partido de Gobierno, aunque no sea necesariamente así.

Por eso, cuatro ex dignatarios de Estado, en declaración conjunta jamás antes vista, expresaron su seguridad de que no tendrían un juicio justo, honesto e imparcial si fueran juzgados por la actual Corte Suprema de Justicia con ministros interinos designados por el Presidente.

Esa declaración, en la que afirmaron también que no eludirían sus responsabilidades pero que demandaban tribunales imparciales, ha repercutido fuertemente en la sociedad, que vincula lo que parece un abuso de autoridad de algunos fiscales en los casos de Pando y el abatido grupo Rózsa, en Santa Cruz, con lo que podría hacer una Corte Suprema de Justicia supuestamente parcializada.

A este triste panorama se añade el conflicto que enfrenta a la Corte Suprema de Justicia con el Consejo de la Magistratura, porque éste, además de nombrar a los fiscales del país, pretende designar a todos los jueces, potestad que reclama el máximo organismo del Órgano Judicial.

Todo ello demuestra que en lugar de hacerle un bien, se le hizo un flaco favor a la Justicia, hundiendo su prestigio y su credibilidad, y generando pugnas por mayor poder.

http://www.laprensa.com.bo/noticias/20-03-10/noticias.php?nota=20_03_10_edit1.php