DECÁLOGO DE ABRAHAM LINCOLN – Ciudadano X – 2.2.2010
¿Saben dónde está el secreto de los americanos? Muy sencillo, hace más de 150 años aprendieron algo que en Latinoamérica pareciera que no hemos ni queremos aprender. Son sólo diez muy simples premisas:
DECÁLOGO DE ABRAHAM LINCOLN
1.- Usted no puede crear prosperidad desalentando la Iniciativa Propia.
2.- Usted no puede fortalecer al débil, debilitando al fuerte.
3.- Usted no puede ayudar a los pequeños, aplastando a los grandes.
4.- Usted no puede ayudar al pobre, destruyendo al rico.
5.- Usted no puede elevar al asalariado, presionando a quien paga el salario.
6.- Usted no puede resolver sus problemas mientras gaste más de lo que gana.
7.- Usted no puede promover la fraternidad de la humanidad, admitiendo e incitando el odio de clases.
8..- Usted no puede garantizar una adecuada seguridad con dinero prestado.
9.- Usted no puede formar el carácter y el valor del hombre quitándole su independencia (libertad) e iniciativa..
10.- Usted no puede ayudar a los hombres realizando por ellos permanentemente lo que ellos pueden y deben hacer por sí mismos.
A esto se pudiera agregar otra lección de Abraham Lincoln:
“Un político puede engañar a unos todo el tiempo, y puede engañar a todos por algún tiempo. Pero lo que no podrá lograr es engañar a todos todo el tiempo”.
“Socialism is a philosophy of failure, the creed of ignorance, and the gospel of envy, its inherent virtue is the equal sharing of misery.”
Traducción: -
El socialismo es una filosofía del fracaso, el credo de la ignorancia, y el evangelio de la envidia, su virtud inherente es la distribución equitativa de la miseria. – Winston Churchill.
Enviado por el Ciudadano X
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Pensamiento de A.Rogers..1931
Todo lo que una persona recibe sin haber trabajado para obtenerlo, otra persona deberá haber trabajado para ello, pero sin recibirlo..
El gobierno no puede entregar nada a alguien, si antes no se lo ha quitado a otra persona.
Cuando la mitad de las personas llegan a la conclusión de que ellas no tienen que trabajar porque la otra mitad está obligada a hacerse cargo de ellas, y cuando esta otra mitad se convence de que no vale la pena trabajar porque alguien les quitará lo que han logrado con su esfuerzo, eso, mi querido amigo, es el fin de cualquier nación.
“No se puede multiplicar la riqueza dividiéndola”.
Dr. Adrian Rogers, 1931
Pastor americano