Las preocupaciones del único gobernante – Spiegel – 16.12.2019
Boris Johnson puede gobernar, el Brexit el 31 de enero es solo una cuestión de forma. Pero las negociaciones más difíciles aún están por llegar, y el Reino Unido lleva mucho tiempo mostrando signos de desintegración.
Ahora los británicos siguen siendo miembros de la UE. Pero después de las históricas elecciones parlamentarias del jueves pasado, la probabilidad es mayor de lo que será en la nueva fecha de salida, el 31 de enero, de que el Reino Unido abandone la Unión Europea.
Porque si el parlamento se reúne nuevamente dentro de poco, algo será diferente en la cámara baja. En el lugar donde varios grupos y facciones se han enfrentado irreconciliablemente durante años, en el que ninguna salida del desastre del Brexit parecía ser mayoritaria, habrá condiciones claras en el futuro.
Johnson Tories ahora tiene 365 asientos. La oposición laborista, por otro lado, se ha reducido a 203 diputados. En general, el gobierno está muy por encima de la mayoría absoluta con 39 votos.
Resistencia rota
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El resultado: Johnson puede gobernar solo en el futuro. Incluso sin la ayuda del DUP irlandés del norte, del que dependían los conservadores en su gobierno minoritario. Incluso docenas de disidentes de su propio partido ya no podían interponerse en el camino del primer ministro. Eso cambia todo para la disputa Brexit.
Tan pronto como se concretó, los diferentes campos siempre se habían quedado estancados al abandonar la UE. La predecesora de Johnson, Theresa May, fracasó tres veces sola con su acuerdo de salida negociado con Bruselas en la cámara baja. Johnson solo alcanzó el segundo obstáculo en el proceso de ratificación. Pero cuando el Parlamento se apresuró a verter sus tratados en la ley británica, los eurodiputados anunciaron nuevamente la resistencia. Johnson retiró el paquete legislativo.
Ahora el primer ministro debería intentarlo lo antes posible. Se dice que el nuevo gabinete se reunirá el 17 de diciembre por primera vez. Dos días después, la Reina podría abrir la próxima sesión parlamentaria con su discurso obligatorio. Al día siguiente, 20 de diciembre, los eurodiputados podrían debatir la ley del Brexit en segunda lectura.
A finales de enero, el Parlamento en Londres y los eurodiputados en Bruselas deben haber aprobado. No hay mucho tiempo para un trato tan complejo. Pero casi no hay dudas serias de que Johnson aún pueda fallar con su nueva mayoría.
30 días para nuevos planes
El factor decisivo ahora será lo que suceda después. Después de todo, los británicos enfrentan las negociaciones más difíciles con la UE después de la salida formal. Luego, el gobierno tiene 30 días para hacer una declaración de cómo prevé futuras relaciones con la UE. Ya ha habido conversaciones sobre esto, cuyos resultados se han registrado en la declaración política no vinculante adjunta al acuerdo de retirada. Pero al final, los británicos tienen que firmar un acuerdo de libre comercio hermético con Bruselas. Un proyecto gigantesco que, según los expertos, debería llevar años.
Sin embargo, la fase de transición, que se supone que Gran Bretaña vinculará con la UE después del Brexit el 31 de enero para evitar que se escape el caos, ya finalizará a fines de 2020. Es difícil imaginar que Johnson podría evitar una extensión de este plazo. Sobre todo porque las conversaciones probablemente sean complicadas a pesar de una nueva mayoría en Westminster. Por ejemplo, el estatus especial planeado para Irlanda del Norte en las futuras relaciones comerciales también ha enojado a muchos tories en el Reino. La cuestión de cómo deberían estructurarse los controles en el Mar de Irlanda sigue siendo un explosivo político.
País dividido
Además: incluso si la situación en el Parlamento ahora es ordenada, Johnson todavía está lidiando con un país profundamente dividido. Además, la unidad del reino es más frágil que nunca.
El SNP separatista y proeuropeo ha logrado una victoria aplastante en Escocia. El curso Brexit de Johnson no es bien recibido en el norte, y ahora debería dar un nuevo impulso al movimiento de independencia. El jefe de SNP, Nicola Sturgeon, ya ha dicho que ahora existe “un mandato para ofrecer al pueblo escocés una decisión sobre nuestro propio futuro”. Lo que ella quiere decir: un segundo referéndum sobre la separación de Escocia del reino.
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También en Irlanda del Norte, las fuerzas republicanas que presionaron por la unificación con Irlanda, que pertenece a la UE, ahora triunfaron, mientras que el DUP probítico sufrió derrotas. Las encuestas ya han demostrado que los separatistas en Irlanda del Norte podrían ganar una mayoría en una posible votación.
Hasta ahora, Johnson ha rechazado con vehemencia cualquier llamado a oradores independientes. La pregunta es cuánto tiempo después de los recientes resultados electorales puede ignorar el estado de ánimo cargado en Escocia e Irlanda del Norte.
Fuente alemán: https://www.spiegel.de/politik/ausland/boris-johnson-nach-der-wahl-die-sorgen-des-alleinherrschers-a-1301241.html
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Sin categoría | Willi Noack 16 Diciembre 2019
