Condescendiente, frustrante, partidario – 11.3.2019

Estos son meses cruciales para Europa. Pero en la desesperada llamada de atención del presidente Macron, el gobierno federal reacciona de manera incorrecta.

REUTERS Maas, Scholz, Merkel

Por Christiane Hoffmann
08 de marzo de 2019

¿Cómo van a mirar atrás los historiadores estos años? ¿Sobre Alemania y su papel en Europa, en el mundo? Es muy posible que nuestro tiempo aparezca como los años en que Alemania perdió Europa. Porque al final de su cuarto mandato, la Canciller ya no tenía la fuerza para aprovechar la oportunidad histórica ofrecida por un Emmanuel Macron de inspiración europea. Debido a que su socio de la coalición socialdemócrata, paralizada por el miedo existencial, no desarrolló ninguna idea de política exterior. Debido a que los alemanes, como dijo el historiador Timothy Garton Ash el año pasado SPIEGEL, “la gravedad de la hora” no habría entendido.

Todo se explicará, pero difícilmente cambiará el juicio de los historiadores: que en aquellos años que decidieron el destino de Europa, Alemania no tenía una política exterior y, ciertamente, ninguna política exterior valiente. Bajo un dúo Merkel / Scholz, el euro probablemente nunca sería introducido.

Editorial – Berlin Silence

El presidente francés envió un recordatorio a los europeos esta semana. Pero su advertencia de no ser “sonámbulos en una Europa floja” fue dirigida principalmente a los alemanes: Querida Angela, Olaf, Heiko: ¡despierta! En Berlín, la desesperada llamada de atención de Macron fue elogiada como una contribución dedicada al debate. Esto fue tan condescendiente como el elogio de un maestro que reconoce la cooperación verbal y entusiasta de un discípulo débil.

En el proceso, Macron ha demostrado cuán grande es el poder de la palabra en la democracia: ha ganado las elecciones presidenciales de la nada con su poder del idioma. Con su gira de conferencias por las salas de usos múltiples de la república, él acaba de defender el movimiento de la vena amarilla. Lo que Macron hace es lo opuesto a la ansiedad anticharismática de Angela Merkel & Co. Él muestra a los alemanes cómo funcionan los debates.

La carta abierta de Macron “a los ciudadanos de Europa” abrió la campaña electoral en Europa, los llamó a la elección fatídica “sobre el futuro de nuestro continente”, para los oídos alemanes que fue una gran cantidad de patetismo. Pero la contribución de Alemania a las elecciones europeas se ha agotado hasta ahora por la negativa de la Unión a excluir finalmente al populista de derecha Viktor Orbán de la familia del partido conservador.

El gobierno de París está, con razón, frustrado, y cada vez trata menos de ocultarlo. Macron ha dejado que el gobierno alemán se sienta en la disputa por el gasoducto Nord Stream 2 sobre lo que significa estar de repente solo. Sigue su propio camino con el impuesto digital, y aparentemente estaba listo para romper el nuevo Tratado Elysée si los alemanes no habían hecho concesiones en las exportaciones de armas.
Imágenes de Moritz Thibaud / ABACAPRESS / ddp

El récord europeo de Merkel después de 13 años en la Cancillería es mixto. La gestión de su crisis en la crisis financiera ha salvado a la UE de algo peor. Pero ella ha dividido a la comunidad en la crisis de refugiados, y no ha logrado acomodar a los británicos a tiempo para evitar un referéndum sobre el Brexit. Con demasiada frecuencia, ha confundido el liderazgo con los esfuerzos en solitario: en la transición energética, en Nord Stream 2 o en la migración.

Y cuando se ofrece la oportunidad histórica de un presidente de Alemania y Europa en París, Macron espera y recorta sus planes. Rompió la idea de un ministro de finanzas europeo, distorsionó el presupuesto de la eurozona y puso el impuesto digital en un segundo plano.

Ya es hora de que Alemania vuelva a hacer política con Europa. La historia alemana ya no es una justificación para el enanismo, se ha convertido en una excusa. Por temor a la próxima elección estatal, antes de los populistas, porque la UE es supuestamente impopular, el gobierno federal teme una discusión seria sobre cómo continuar con Europa. La mayoría de los alemanes en las encuestas abogan por una mayor integración europea, y el 89 por ciento ve a Francia como un socio confiable.

Alemania tiene que volver a pensar en Europa, tiene que promover sus creencias e intereses, pero no debe haber nada más solo. Ahora debe impulsar la integración con Macron France, que podría comenzar en la política exterior y de defensa.

También significa que debe haber una flexibilidad máxima en la UE para diferentes niveles de integración para que Brexit no pueda encontrar imitadores. Se debe permitir picotear las pasas. Y Alemania debería justificar a Europa menos con los horrores del pasado que con las ventajas de poder político y geoestratégicas para el futuro.

Fuente: https://www.spiegel.de/plus/deutschland-muss-wieder-europaeisch-denken-a-00000000-0002-0001-0000-000162787620?fbclid=IwAR3BI8PgbAeEORiKJfyfqZeQuRVw4eKoOt8wPk4V6L-2pm0tTOJubS4Lnno

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