¿HERRENMENSCHEN en puertas?

¿HERRENMENSCHEN en puertas?

Autor: Willi Noack

Publicado: -

Clasifico grandes temas en tres categorías:

a. Temas que pretendo entender bastante bien por mis estudios teóricos y experiencias adquiridas.

b. Temas pertenecientes a los conocimientos generales y permanentemente ampliados por estudios que me permiten entender algunas dimensiones relacionadas, y me atrevo a formular preguntas sin poder dar las respuestas pertinentes, tarea para expertos del área científica específica, y

c. Temas que simplemente no entiendo; por lo tanto me callo, pero tratando de aprender.

Esta introducción me parece necesaria para aclarar que este artículo pertenece a la clase b, o sea, habrá preguntas sin respuestas. De paso observo que mucha gente utiliza los micrófonos, haciendo uso de sus derechos a la libre expresión para emitir opiniones sin tener criterio, triunfando, de esta manera, la vanidad sobre la humildad y responsabilidad – ¡qué pena!

El tema de hoy se llama “tecnología de genes”, bajo el enfoque de la relevancia para nosotros que vivimos en un país periférico demorado en materia de avances tecnológicos. Entonces: ¿Nos interesa este tema? Tajantemente expresado: mucho, mucho, mucho. Y sin duda, se trata de uno de los “temas grandes” de la humanidad entera que tiene que ser tratado en el siglo entrante. Muchas películas recientes utilizan el fenómeno de la creación de “criaturas” humanoides, con características fisiológicas y síquicas manipuladas; en realidad se trata de versiones modernas de películas tipo “Frankenstein”. Seríamos bastante ingenuos si consideramos que se trata de una ficción científica. Hay gente entendida que sospecha que en laboratorios secretos científicos experimentan con mamíferos desde hace tiempo, sin controles, y con financiamiento opulento. ¿Control? ¿Fomento?, quizás. Durante el régimen criminal de los Nazis habían programas de eutanasia (asesinato de discapacitados) y experimentos humanos bajo la dirección de “médicos”, tales como Mengele.

Lo que sucedió en un régimen totalitario criminal, ¿puede repetirse en sociedades demócratas, organizadas en Estados de Derecho? Como no, según la advertencia preocupada de todavía pocos científicos conscientes. Todos los procesos empiezan con primeros pasitos no muy significativos, para, en muchos casos, adquirir una dinámica que escapa del control de sus protagonistas. Casi siempre se enfatiza, al principio, la bondad para la humanidad y se achican los riesgos, las desventajas, la “bomba de tiempo” que se está construyendo en nombre del progreso de la raza humana. De esta manera, el público inexperto tiene una noción opaca de que la nueva tecnología es positiva.

Las bondades de los avances tecnológicos podemos constatar también en nuestra región. En la ganadería se practica la inseminación artificial, el transplante de óvulos, y en la reproducción humana el alquiler de vientres. En el agro se ocupa semilla mejorada (léase: manipulada) de precio alto proveniente de industrias de países líderes, logrando ellos superganancias, que incrementan el rendimiento y sobre todo la rentabilidad. Son ejemplos elocuentes que demuestran sólo bondades. Pero, es de temer que eso no es toda la milanesa. En algunos países las sociedades cívicas organizadas rechazan productos que han sido manipulados, por temores que puedan afectar negativamente la salud, quizás puede tratarse también de un proteccionismo camuflado de la producción doméstica.

Todas estas preocupaciones quedan pequeñas frente a la amenaza principal que la tecnología de genes puede producir personas con características determinadas por los científicos, que podrían ser favorables, por ej. la resistencia contra enfermedades, o el mejoramiento de capacitades cerebrales, o fuerzas extraordinarias corporales, o longevidad. Siempre existía esta superioridad de los unos sobre los otros, pero en el futuro será una cuestión de tener dinero para pagar la obtención de cualidades superiores, en vez de que sea la naturaleza misma que distribuye diferentes dotes. Ya están en venta óvulos humanos para reproducirse con calidad genética superior. La amenaza para estratos sociales pobres, y para países pobres, será, quizás, por lo tanto tener que competir en una posición perjudicada con “individuos mejorados”, por el hecho de que no pertenecen también a los ricos. Reiterándolo y basado en criterios de científicos internacionales, técnicamente ya es factible mucho más manipulión de la que podemos imaginarnos, ¿pero son ética y moralmente aceptables tales manipulaciones?

Se precisa un código de ética sobre el particular, con vigencia mundial. En este mundo cada vez más enfatizando el éxito individual en desmedro de responsabilidades sociales y de la solidaridad del fuerte con el débil, es de temer que resultará muy difícil establecer este código y garantizar su acatamiento por todos, es decir, por los ricos que tendrían que renunciar a una ventaja comparativa extraordinaria y excluyente.

Como se ve, existe una tremenda amenaza real a través de la revolucionaria tecnología, y ya hay primeros intentos de supeditar la ética a la ciencia reproductiva humana (Sloterdijk). Lo que aparentemente es un tema para un reducido círculo de científicos, en realidad puede determinar el futuro de la humanidad, y reaparece el fantasma de una raza superior, los HERRENMENSCHEN arias del Tercer Reich, que dominan. ¡Una visión de horror, imaginarse que los Hitlers del mundo pueden construir combatmáquinas humanoides de guerra!

fecha: 2001-07-28 23:42:23
autor: Willi Noack

Editor: Willi Noack | Administración Técnica: Jose Carlos Choque Y. | Creatica Ltda.