Escenario apocalíptico (artículo enviado a END en fecha 8.7.2002)

Autor: Willi Noack

Publicado: eforobolivia, (8.7.2002)

Escenario apocalíptico

Willi Noack

El siguiente artículo va en “contra ruta”: cuestiona la revolución que aparentemente está de moda, y aboga por la evolución. Cuestiona el “cambio” (que significa “convertir en otro, especialmente en lo opuesto o en lo contrario”, RAE), cuando no se sabe en qué esto nuevo consiste, pues no hay un plan de gobierno de los cambistas.

Amigos consultados me recomendaron escribir esta nota de manera no alarmante, si bien firme en la argumentación, y modificar el título. Lamento, no puedo hacer caso, pues diariamente se juntan las informaciones que indican que la situación del país será muy pronto caótica y anárquica. En este artículo sólo relaciono diferentes elementos de la realidad del país con políticas anunciadas para cambiar a Bolivia. Mediante esta análisis del “what-if” (qué si….) es fácil detectar que el escenario será apocalíptico. Me advirtieron que escribir en estos términos es soberbio. Si tratar de sumar dos más dos y llegar a cuatro, es soberbio, bueno, acepto que el ensayo puede ser denunciado como soberbio.

Tenemos los resultados de las elecciones. No dudo que pronto tendremos un Gobierno. El asunto es: ¿habrá gobernabilidad? Según la RAE, “gobernable” significa algo “que puede ser gobernado”. ¿Bolivia será gobernable a partir del 6 de agosto de 2002?

Hay vientos fuertes que soplan en respaldo de “lo nuevo”, del “cambio”, siendo el MAS el protagonista principal. Los expertos afirman de este partido que su definición ideológica está concentrada en la defensa de la soberanía nacional y el rechazo de la intromisión política y militar de EE.UU. –“Para lograrlo pretende llevar la acción parlamentaria a coordinación con la movilización callejera” – ¿inclusive sublevación? (El Deber, 7.7.02). Recuerdo que el líder del MAS prometió en una entrevista a ATB, “a pasar de la protesta a la propuesta, con métodos pacíficos.” Me enteré de que en estos días salieron los primeros 80 (¿?) millones de dólares del país, dinero de quienes les faltó la confianza en las promesas.

La pregunta central es: Bolivia como país dependiente, ¿tiene soberanía suficiente para implementar nuevas políticas, sea en el parlamento y/o en la calle, que contrasten totalmente con los paradigmas vigentes y cuyos protagonistas son los países de los cuales depende Bolivia? La necesidad de superar con urgencia e importancia la crisis económica, la corrupción, la exclusión y otros síntomas, ¿quién la va a negar? Desde la promulgación de la Ley 21.060 advierto en estos carriles sobre las injusticias del “modelo del capitalismo salvaje”, paralelamente a un alegato permanente a favor de la Economía Social de Mercado, pero la “Bolivia privilegiada” esperó hasta que la “Bolivia excluida” gritara basta. Ningún partido político luchó decididamente contra la exclusión, y ahora se les presenta la factura: la redistribución fracasó rotundamente.

El problema está en el “cómo” actuar. Lo que propone MAS (anti-1008; anti-capitalización; anti-INRA; anti-constitución; anti”modelo”; anti-yanqui) no es factible, por más que la soberanía teóricamente otorga el derecho; esta soberanía de hecho no existe, ni siquiera para un país como Argentina. Más bien existen condicionamientos internacionales (¡no sólo de los EE.UU.o del FMI!) y convenios internacionales que exigen ser respetados, por ejemplo el HIPC II. Hay vientos que soplan fuerte pero es de temer que se convertirán en un huracán incontrolable, pues no hay quién reduzca las pretensiones a su tamaño real, explicando las consecuencias, las cuales la euforia desenfrenada del momento impide ver. El experto Lazarte dijo: “No sé si les interesa romper el hilo democrático y volver al pasado”; Mario Rueda Peña prevé una “embestida social”. (El Deber, 7.7.02). No se sabe, pues no existe un documento que establezca la visión del futuro que tienen los cambistas de Bolivia. Pero existe el anuncio de las movilizaciones callejeras.

Bolivia debe cerrar la brecha entre las dos Bolivias y garantizar “bienestar para todos” (Ludwig Erhard) mediante la evolución, pues para una revolución no hay coyuntura de factibilidad.

En www.eforobolivia.org encuentra amplia documentación sobre el tema.

fecha: 2002-07-08 16:28:49
autor: Willi Noack

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