Humor

Una tarde un famoso y acaudalado abogado iba en su limosina, cuando vio a dos hombres a la orilla de la carretera comiendo pasto .

Intrigado, orden・a su chofer detenerse y baj・a investigar.

Le pregunt・a uno de ellos:

- ソPor qu・est疣 comiendo pasto , muchacho?

- No tenemos dinero para comida, ser – dijo el pobre hombre – Tenemos que comer pasto .

- Bueno, entonces vengan a mi casa y yo los alimentar・- dijo el abogado.

- Gracias, don, pero tengo esposa y dos hijos conmigo. Est疣 all・ debajo de aquel 疵bol.

- Que vengan tambi駭 – dijo el abogado.

Volvi駭dose al otro pobre hombre le dijo:

- Usted tambi駭 v駭ga, mi amigo.

El hombre, con una voz lastimosa dijo:

- Pero, ser, yo tambi駭 tengo esposa y seis hijos conmigo.

- Tr疇los a ellos tambi駭 – respondi・el abogado.

Entraron todos en el enorme y lujoso carro, lo que no fue f當il, a佖 trat疣dose de un automil tan grande como la limosina.

Una vez en camino, uno de los pobres tipos mir・al abogado y le dijo:

- Ser, usted es muy bueno. Gracias por llevarnos a todos.

El abogado le contest・

-。No hombre, no tenga pena, estoy feliz de hacerlo! Les va a encantar mi casa… 。El pasto est・como de metro y medio de alto!

Moraleja: Cuando creas que un abogado te est・ayudando, pi駭salo dos veces…

Editor: Willi Noack | Administración Técnica: Jose Carlos Choque Y. | Creatica Ltda.