¿Es ‘Bolivia, libre, independiente, soberana’? – Willi Noack – 20.2.2004
¿Es “Bolivia, libre, independiente, soberana”?
Willi Noack
Según el Artículo 1° de la CPE es “libre, independiente, soberana,…” – ¿es esto realidad? Y si no es realidad, ¿es objetivo, ficción o utopía? Contestar a esta pregunta con absoluta sinceridad y realismo resulta en estos tiempos imprescindible cuando se discutan políticas alternativas antisistémicas. ¿Son factibles y viables tales propuestas pues el país es libre, independiente, soberano?
Primero las definiciones según la RAE: el soberano es la “Autoridad suprema del poder público”-“Independiente significa que no tiene dependencia, que no depende de otro.” – “libre estipula que tiene facultad para obrar o no obrar” y “libertad es la facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera o de otra, y de no obrar, por lo que es responsable de sus actos.”
Interesante es analizar los problemas de la UE para adoptar su Constitución, que exige la renuncia parcial a la soberanía de los 25 miembros, y una vez aprobada se habrán sometido a una autoridad suprema ya no nacional.
Muchos Convenios Internacionales limitan la soberanía, pues un país soberano se compromete, al adherir, a obedecer lo convenido; BOLIVIA ha firmado muchos convenios.
Existe una necesidad absoluta de garantizar la seguridad jurídica, tanto internacional como intranacional. Un país que viola la confianza en la supuesta seguridad jurídica, en nombre de ejercer su soberanía, se autodistancia de la comunidad que respeta este principio y será sancionado consecuentemente.
Actuar con unilateralismo como país, como procede en la actualidad el más poderoso de todos, atribuyéndose el derecho soberano para ello, en contra de la onU, en contra de la opinión de grandes sectores de la comunidad mundial, también tiene sus límites.
El poder económico de grandes conglomerados pone, además, límites a la soberanía de los gobiernos de países libres pero dependientes. Este poder es real si bien no exento de críticas fundamentadas, pero lo que cuenta: es real y globalizado bajo la forma del orden del capitalismo y de la economía de mercado.
Estos pocos ejemplos demuestran que existe una imperiosa interdependencia entre los países, gobiernos, poblaciones, que obliga a concluir que los postulados de nuestra CPE son más que todo una utopía, una visión de un futuro distante. Definitivamente BOLIVIA no cuenta con elevados grados de soberanía, independencia, ni de libertad. Lo que es triste, pero una realidad que frecuentemente se niega, llevando así el autoengaño a tal extremo de propagar políticas que no son factibles. Es cierto, Bolivia podría, ¡teóricamente!, optar por soluciones antisistémicas como el socialismo o comunismo, o el libre mercado para la coca, pero las reacciones serían drásticas y en poco tiempo se impondría la realidad: no es factible. La fuerza normativa de los hechos se impone. Cualquier política, sea la renacionalización de recursos naturales, el no-acatamiento a la necesidad de la descertificación, el cumplimiento con el servicio a la deuda, etc., no debe descuidar el muy estrecho margen de actuar con soberanía cuando en realidad somos un país dependiente y vulnerable. El chauvinismo no da resultados, ni siquiera para los dueños del mundo. El “orgullo nacional” opaca la vista a la realidad, —y se lo cultiva mejor mediante una victoria de 3:1. ¡Felicidades, Bolivia!
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fecha: 2004-03-21 22:28:13
autor: Willi Noack
