El paro: la buena noticia del día – Willi Noack – 29.4.2004
El paro: la buena noticia del día
Willi Noack
Sí, el paro sirve para ver lo bueno cuando muchos nos quieren hacer creer que vamos a pique. Unos cuantos sienten un cierto placer de experimentar irresponsablemente, pero la gran mayoría sigue estoicamente su ritmo de vida de siempre.
Lo más destacado al analizar el paro es que cada vez más gente repudia los abusos y tiene coraje de mostrar abiertamente que NO respalda las convulsiones. Si han sido 20.000 personas (según el New York Times) las que manifestaron el jueves pasado en el centro de La Paz, es una minoría de ninguna manera representativa de la población total.
Sin mucha exageración se puede constatar que hay una obligación casi terrorista de acatar las medidas decretadas por una cúpula minúscula de dirigentes. Negarse a acatar sus instrucciones significa sentir represalias fuertes. Eso vale en cuanto a la obligación de participar en demostraciones de la UAGRM como para los gremialistas o los transportistas. Si no obedecen las directrices de los caciques de sus respectivos sectores, son castigados. Las sanciones en el imperio del Mallku son muy drásticas según testigos que reservan su identidad.
La buena noticia del día es que si hubiese libre decisión, el número de manifestantes sería mucho más inferior. La buena noticia es que los bolivianos quieren mayoritariamente vivir en paz yseguir mejorando su situación personal, familiar y colectiva. Si damos crédito a las encuestas una mayoría impresionante apoya al Presidente Mesa, y probablemente este mismo apoyo genera la rabia de los caciques de las minorías que no saben cómo hacer prosperar su propio proyecto.
Otra buena noticia del día es que en la prensa no sólo presentan las “noticias amarillas” sino que informan sobre los abusos. Bueno, la gran mayoría se complace (todavía) en relatar lo morboso o lo negativo, y los medios reflejan la sociedad, por lo tanto están satisfaciendo la demanda. Lo bueno -no obstante- es que sobre la situación en La Paz podemos leer (citas): “El paro no pudo vencer a las ganas de trabajar – Los ciudadanos se opusieron a las marchas – El miedo cerró puestos en algunos mercados”.
Lo que falta en el trabajo de los medios es un criterio crítico que evite creer ingenuamente lo que dicen los entrevistados. Un ejemplo: “…Walter Gómez, exteriorizó que si bien las pérdidas económicas son cuantiosas para el sector…” ¡Veamos!Tres centavos sube el precio del combustible. Un micro gasta 100 litros por día. 3 centavos por 100 litros = tres bolivianos. ¿Tres bolivianos? ¡Tres bolivianos!¿Tres bolivianos representa una pérdida “cuantiosa”? Me siento tomado del pelo. Y Ud., amigo periodista, asume responsabilidad delante de sus lectores por desinformar y fomentar indirectamente la convulsión.
La buena por lo tanto: resulta cada vez más difícil tomarle el pelo a la gente y la gente se niega a apoyar demostraciones de fuerza que persiguen muchas metas menos las de interés común.
Acepto apuestas: si este jueves pasado no hubiera existido la amenaza de represalias para los “desobedientes” del orden de parar, el acatamiento hubiera sido mínimo, pues en Santa Cruz “los taxis que superan las 15.000 unidades también se vieron perjudicados, ya que muchos de ellos no salieron a trabajar por temor a los “chicotazos” y pinchazos de sus llantas.”
www.eforobolivia.org
fecha: 2004-06-13 17:11:35
autor: Willi Noack
