Una muy buena noticia lamentablemente ignorada – Willi Noack – 24.6.2004
Una muy buena noticia lamentablemente ignorada
Willi Noack
En estos tiempos no abundan las buenas noticias. Y cuando se presenta una verdaderamente favorable se hace caso omiso. Para colmo, son medios internacionales los que destacan el logro.
¿De qué se trata? En la reciente XI conferencia de la UNCTAD fue elogiada una empresa boliviana, de Riberalta, como “estrella” por su éxito. Existen tantas distinciones, y algunas entre ellas que se venden, pero cuando UNCTAD enfatiza con palabras casi entusiastas un concepto y su aplicación en la práctica, ya es un reconocimiento de mayor importancia.
En Riberalta, municipio de elevadísimo desempleo y subempleo, perjudicado por un costo de energía eléctrica muy elevado y que carece de una infraestructura vial para llegar a los mercados de manera competitiva, se inició hace unos diez años un proyecto factible y viable. Contra vientos y marea y con una perseverancia impresionante, el Ing. Oscar Llanque, presidente de Madre Tierra Amazonia SRL, lanzó con sus colaboradores una iniciativa de diversificación y de agregación de valor a la materia prima. El ingeniero logró convencer, quizás a veces seducir, a campesinos de que una fruta amazónica es capaz de permitirles ganarse decentemente su vida con su producción. Esta fruta es el copoazú. (Más detalles y una foto de la fruta exótica en www.riberalta-bolivia.com ). Su operación principal consiste en plantar, recolectar y procesar industrialmente el fruto copoazú, a lo largo de ese territorio. Las frutas son producidas por 29 comunidades indígenas. Esta empresa ha conseguido disminuir los niveles de pobreza en la región, antes basada casi exclusivamente en la explotación de la castaña y madera. De paso sea mencionado que no se produce hoy en día -en cantidades considerables- goma en la región, como se lee con frecuencia. El negocio despegó y de una producción de 20 toneladas de pulpa de copoazú el año pasado, espera llegar a 150 toneladas en 2005.
El caso merece un gran aplauso por demostrar que Bolivia es posible, como reza el título del Informe 2004 del PNUD, siempre y cuando se creen las condiciones. Una condición ha sido en el caso en cuestión haber logrado constituir una alianza estratégica con entes que apoyaron el proyecto. Otra condición es el hecho de que un empresario schumpeteriano, léase: con visión y ánimo de enfrentar nuevos retos, ha EMPRENDIDO esta nueva actividad, aplicando hábilmente los conceptos modernos de la ciencia, solamente para mencionar el concepto de marketing. Importante es, además, el hecho de que esta actividad se enmarca claramente en el principio de la sostenibilidad, tratándose de una producción en base de materia prima renovable.
Mejor que hablar a manera de cátedra sobre las posibilidades existentes reales de aprovechar en Bolivia nuevos productos industrializados –y todavía en regiones muy alejadas y en condiciones desfavorables- resulta presentar el éxito logrado en un caso concreto.
Bolivia es posible, como no, si más y más personas copiasen el ejemplo de este cometido, aprovechando las potencialidades que por todos lados existen.
Mi descontento con el silencio medial se debe a la pérdida de una excelente oportunidad para sembrar confianza en la gente de que es posible salir del estancamiento del país.
NOTA: Este artículo se publicará en EL DEBER en fecha 27.6.2004.
fecha: 2004-08-18 00:07:36
autor: Willi Noack
