A quiénes creer

 

A quiénes creer

Autor: Alfonso Moreno Gil

Publicado: Santa Cruz, 28 de noviembre de 1999

 

Aún restan 5 días para seguir escuchando a los candidatos al Gobierno Municipal, como también los informes de las últimas encuestas electorales, y 7 para la realización de los comicios.

Al parecer los partidos políticos o las empresas dedicadas a hacer encuestas utilizan métodos distintos. Sin menoscabo de los trabajos serios en la materia, que ciertamente los hay, es propicio recordar lo que se pregunta frecuentemente el ciudadano común, aturdido por tanto confusión por los datos nada coincidentes que difunden los mismos partidos políticos, aparte de los que provienen de otras fuentes: “¿Será que solamente encuestan a los que les conviene, o por último inventan los resultados y comunican lo que les interesa?”

Los resultados de uno y otro lado son evidentemente muy distintos. Por eso también el pueblo se interroga: “¿Se habrá encontrado una nueva forma de inducir al electorado?” Probablemente los asesores políticos piensan que la mayoría de los electorales votarán por el candidato ganador, y por ello insisten en asignar los mayores índices de preferencia en las encuestas a sus candidatos. Lo grave está en las propuestas electorales que provocan falsas expectativas por carecer de asidero real o porque no hubo verdadera intención política para cumplirlas. Y, sencillamente, sólo después de 3 ó 4 años de gestión sabremos si fueron sinceros los que resultaren ganadores.

¿Cómo podemos los ciudadanos abrigar la certeza de que efectivamente aquel candidato cumplirá sus ofertas? ¿Cómo saber anteladamente que los nuevos concejales cumplirán el deber no sólo de fiscalizar la gestión del alcalde, sino de esforzarse para que sus propias ofertas electorales sean aplicadas en la nueva administración?. ¿Cómo estar seguros de que el Concejo y el Alcalde interpretarán adecuadamente nuestras necesidades y se esmerarán en satisfacerlas dentro de marcos de eficiencia, coordinación efectiva, honradez y ética, de tal modo que los ciudadanos tengamos confianza en nuestra comuna? A fin de no esperar 3, 4 ó 5 años de gestión para saber si cumplirán o no sus ofertas, opinamos que quienes resulten elegidos deben dar señales claras e inequívocas, desde el inicio del nuevo período de labores, de que realmente quieren hacer bien las cosas.

Lo esencial es que haya plena y genuina voluntad de trabajar en beneficio del municipio y sus habitantes. A este respecto recordamos a todos los candidatos el anhelo ciudadano de que sobre la base de acciones concretas los nuevos miembros de los gobiernos municipales de nuestra capital y las provincias, estén dispuestos a evitar la corrupción, como son, por ejemplo, las coimas, los sobreprecios en obras y adquisiciones, el nepotismo, la contratación de funcionarios sólo por su militancia partidaria -y dar muestras de respeto a la carrera administrativa, garantizando la continuidad y permanencia de personal idóneo.

Además, otro aspecto fundamental es que se identifiquen con la elevada finalidad de impulsar la educación, la salud, el deporte y la cultura, asignando los necesarios recursos para estos rubros, cuando se considere cada presupuesto anual, con una visión integral de nuestra realidad.

Es preciso también que en los hechos unan esfuerzos con la sociedad civil y los respectivos organismos del Estado para luchar moral e institucionalmente contra la drogadicción, el alcoholismo y la formación de pandillas juveniles, encarando campañas de rehabilitación, y, especialmente, de carácter preventivo. Por cierto, es menester propender en Santa Cruz a un completo desarrollo humano. El mejoramiento de la calidad de vida de la población es tan necesario como el deber de contribuir a consolidar un ambiente de seguridad ciudadana.

Lo importante es que quienes ganen los comicios de diciembre cumplan sus compromisos y trabajen de la mejor manera posible, en función del bien colectivo y los intereses generales de la ciudadanía, más allá de las diferencias partidistas. Como dice el adagio popular: “Obras son amores…”.

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