Negociaciones enervantes — SECCION 100, 18.07.1989

Negociaciones enervantes — SECCION 100, 18.07.1989

Autor: Willi Noack

Publicado: SECCION 100, El Deber, 18.07.1989
Negociaciones enervantes
Willi Noack
SECCION 100, 18.07.1989

Anoche estuve muy feliz cuando vi en un acontecimiento social, a un muy buen amigo, un político. Por fin, pensé, termina esta insoportable guerra de nervios, pues de primera mano voy a recibir noticias confiables y confidenciales, sobre quién será presidente.

Mi amigo F. de T. del ABCMNRI-partido (tengo que respetar su anonimato pues, de no ser así, jamás me pasará en el futuro los pequeños secretos que conoce todo el pueblo), me explicó lo que es cierto, lógico, racional, etc. Me explicó todas las alternativas posibles, los pros y los contras, en fin, ha sido una clase privada en materia de CPE (Constitución Política del Estado) por un lado y, por otro lado, deliberaciones sobre características imprescindibles del nuevo Presidente, en vista de que nuestra democracia presidencial prevé amplias facultades al mandatario. El tema central, por lo tanto, era la persona de los postulantes a la presidencia – y no los programas políticos de los partidos correspondientes. Estoy acostumbrado (he participado en forma activa en la formación del “gobierno” de una aldea alemana, hace mucho tiempo), a ver como se acercan aquellas agrupaciones que tienen la mayor afinidad programática, por lo tanto, el mayor chance de acordar sobre una política a llevarse a cabo en los próximos años, ya que no discrepan en el contenido. A las discusiones sobre las personas, se les da menor importancia, y si en ellas existen problemas no superabas, se elige una persona (no siempre personajes) que pueda hacer de catalizador, unir programas. Con esta misma lógica, es por discrepancia en lo pragmático como a veces se rompe una coalición entre los grupos partidarios políticos que comían el gobierno – y no tanto por discrepancias sobre personas.

Mi amigo, anoche me aseguró que en lo “grueso” los tres partidos coinciden en el rubro futuro del país (estabilidad en vez de inflación, dentro del orden económico del libre mercado) pero, no obstante esta coyuntura política favorable, no se logra definir sobre el ”quién con quien para elegir a quién”, aunque todo saldrá bien.

Bueno, bueno, bueno.

Insisto (perdón, apreciado amigo político, que cuestiono ahora, después de haber pensado nuevamente sobre nuestra conversación) en qué no me gusta este comportamiento humano de no tomar los asuntos con demasiada urgencia para que, de la noche del 7 de mayor al siguiente día, o en el menor tiempo posible, tener un gobierno. Este actuar, que consiste en darse el lujo para charlar, (“mañanar” sería un verbo preciso que no existe en mi diccionario), no es nada aconsejable cuando se trata de un asunto de esta magnitud, pues lo que está en juego es nuestro porvenir: nuestra economía demasiado frágil para aguantar una pérdida masiva de confianza, la cual depende de conocer los parámetros del futuro quehacer de los participantes en esta economía.

La verdad es que es que no me gusta esperar otras tres semanas hasta conocer la futura política del país.

En casi todos los asuntos de la vida cotidiana no me molesta que las decisiones tomen mucho, a veces muchísimo, tiempo para madurar, pues da lo mismo si sale o no; pero este asunto del nuevo Gobierno, por su incidencia en la confianza en el futuro, no debería quedarse sin solución durante tres largos meses.

No sé, si por ser “gringo” (alemán de Berlín) es que me falta la paciencia o tolerancia para procedimientos tardos y pesados, o si estoy en lo correcto con mi preocupación, pues poco me tranquiliza tu afirmación, amigo político: “No te preocupes, todo saldrá bien, habrá presidente, vas a ver”. Caramba, me cuesta.

fecha: 2002-08-27 16:45:26
autor: Willi Noack

Editor: Willi Noack | Administración Técnica: Jose Carlos Choque Y. | Creatica Ltda.